Marcelo Hidalgo Sola nos invita a seguir conociendo el casco histórico de la Ciudad de Buenos Aires y sus edificios más emblemáticos : hoy visitamos el Cabildo , la institución más importante de la época colonial 

Recorrer en moto el perímetro del casco histórico permite conocer en una vuelta manzana los edificios más ilustres que tiene la Ciudad de Buenos Aires. Entre ellos, está el Cabildo,que ubicado en la calle Bolívar 65 , está emplazado en el mismo espacio que fuera designado por el fundador de la ciudad, Juan de Garay , frente a la Plaza de Mayo. Desde 1933, forma parte del patrimonio de Monumentos Históricos de la Nación y fue objeto a lo largo del tiempo, de sucesivas modificaciones para lucir tal como hoy desde la década del 40.

El vocablo ‘Cabildo’ proviene del latín capitulum, cuyo significado es “estar a la cabeza”. Y, su misma presencia en la época de la colonia , era una condición jurídica sine qua non para que existiera una ciudad, de acuerdo a lo establecido en las Leyes de Indias. Las autoridades de la distinguida institución eran elegidas por la sociedad local y estaba conformada por los ‘vecinos ’de la ciudad . Como parte de sus funciones el Cabildo tenía el deber de ocuparse de los asuntos públicos en relación a la administración de las recaudaciones de impuestos, la vigilancia, el abastecimiento y la impartición de justicia, entre otros. Los ‘vecinos’ o ilustres autoridades del Cabildo podían ser sólo los vecinos blancos, mayores de edad, propietarios y con distinción y prestigio social . Sobre sus hombros caía la responsabilidad por las decisiones que afectarían a todos los habitantes de la incipiente metrópolis. Si los asuntos apremiaban se llamaba a un “cabildo abierto” con celeridad, tal como ocurrió en los sucesos de Mayo de 1810 . 

El Cabildo fue sede de la primera cárcel que tuvo la ciudad de Buenos Aires desde su fundación en 1580. Allí iban a parar los reos, tanto hombres como mujeres, por delitos como homicidios, robos, prostitución y, también, por infracciones de tipo moral . Respecto a estos delitos, se penaban en la época colonoial los casos de infidelidad, las promesas de matrimonio incumplidas y los que eran sorprendidos viviendo en concubinato. También se tienen registros de casos de jóvenes que por rebelarse contra la autoridad paterna fueron al calabozo junto con vagabundos y esclavos y esclavas que eran acusados por sus amos por robo o desobediencia.

Cabildo de Buenos Aires: quién te ha visto y quién te ve

El Cabildo, tal como luce hoy día en lo relativo a su aspecto, data de 1940. Pero, a lo largo del tiempo, fue variando de aspecto en varios momentos y siempre por cuestiones urgentes. Por ejemplo, en 1725 estaba en muy mal estado y tuvo que ser demolido ya que su estructura anticipaba un derrumbe. Entonces, comenzó a levantarse un edificio nuevo a partir de un proyecto del arquitecto italiano Andrés Blanqui. Así, comenzó a tomar forma el Cabildo tal como lo podemos observar hoy. Las obras del primer piso estuvieron listas en 1748 y, en 1773, apareció la torre con la cúpula. Y este mismo Cabildo fue el de los patriotas de 1810, momento de su mayor esplendor.

En 1889, cuando se decidió la apertura de la Avenida de Mayo, el ingeniero Juan Antonio Buschiazzo resolvió demoler un costado del Cabildo, con lo cual desaparecieron los tres arcos del lado norte.Durante la mencionada renovación, la estructura erigida por Benoit fue demolida debido a que su masa representaba una amenaza para la solidez del edificio.Con estos cambios significativos el edificio perdió su simetría frontal hasta que en agosto de 1931, siendo presidente de facto José Félix Uriburu, se demolieron los otros tres arcos del lado sur para armonizar al edificio y dar paso a la diagonal Julio A. Roca, a pesar de las protestas generalizadas.

El Cabildo: hoy luce como verdadero y ‘original’

En total , la fachada del Cabildo fue remodelada 5 veces y la puesta en valor definitiva que le dió su vista actual tuvo su origen en 1930 , durante la dictadura de José Félix Uriburu . En esa época se impulsó un fuerte discurso de corte nacionalista y se remodelaron los edificios históricos más significativos. Así fue como el arquitecto Mario Buschiazzo remodeló el Cabildo e imitó su construcción original en base a una acuarela de 1829 del gran artista y pintor de Buenos Aires .

La inauguración tuvo lugar el 11 de octubre de 1940 y, aunque la obra recibió algunas críticas, fue la primera restauración de un Monumento Histórico Nacional realizada en la Argentina que buscó recuperar científicamente una obra de tanta trascendencia para la historia del país.

Las obras de puesta en valor incluyeron además, la creación de una plaza detrás del edificio, que estuvo largo tiempo ocupada por vendedores ambulantes de libros antiguos y en 1960, se los expulsó para realizar en ese espacio una casa similar a los Altos de Riglós (el edificio colonial que existía en el lote contiguo al Cabildo) y crear un auténtico patio colonial que brindara una visión de ‘época’ en el mismo centro de la Buenos Aires moderna. Por ello, se cree que quien visite el Cabildo en la actualidad estará ‘viendo’ una construcción muy similar a la que tuvo en sus orígenes , por aquellos días en que los habitantes de la Patria sembraron las primeras semillas de un futuro en Libertad.