Ubicado en el barrio de Puerto Madero, el Puente de la mujer , obra del arquitecto español Calatrava, con su fina estampa se ha convertido en un ícono indiscutido de la Ciudad de Buenos Aires.
En Puerto Madero, se encuentra un puente muy bello, de diseño estilizado, elegante y sofisticado, muy femenino, el Puente de la mujer. Su estructura giratoria que puede abrirse para dar paso a barcos de gran porte, une los antiguos docks de almacenaje de mercaderías del puerto -hoy importantes locales gastronómicos- con el casco histórico de la ciudad .
Recorrer en moto esta zona, invita de un modo particular a dejarse llevar por la huella y la fragancia que dejaron algunas de las mujeres más ilustres de nuestra Patria. Todas ellas, son recordadas aquí, en Puerto Madero, de un modo especial. Por ejemplo, a modo de homenaje algunas calles del barrio llevan su nombre y comparten con todas las mujeres del mundo, otro hermoso regalo que el arquitecto español Santiago Calatrava, pensó para celebrar el genio femenino presente en todo el mundo : el Puente de la Mujer.
Juana Manuela Gorriti, Macacha Güemes,Aimé Painé, Azucena Villaflor , Alicia Moreau de Justo y Julieta Lanteri son mujeres que han marcado con su vida y su legado los escenarios de las artes, las ciencias y la política de nuestro país . Su nombre, como bandera, recorre la historia argentina y, en este espacio de la Ciudad, son luz y fuente de inspiración.
Un puente con diseño de vanguardia
El puente de la mujer, apostado en el Dique 3 de Puerto Madero une esta porción de Buenos Aires con su centro histórico , alzándose por el brazo de agua que ingresa en el canal de la antigua estructura del puerto de Buenos Aires . Un complejo-explica Marcelo Hidalgo Sola- formado por canales, esclusas y docks de almacenaje de mercaderías inspirados en el mejor puerto que tenía el mundo en el siglo XIX , el de Liverpool, Inglaterra. Solo que el modelo funcionó a la perfección en aquel país de costas altas y aguas profundas y fracasó en Buenos Aires, con una costa baja , bancos de arena y suelo playo.
El diseño del Puente de la mujer en el dique 3 , según los expertos, busca emular a un tradicional paso de baile del universo tanguero. Un paso clásico, del género más ligado a Buenos Aires y a sus orillas. El hombre es simbolizado por el pico o ala blanca que se alza como una aguja al cielo. De esa ala, sostiene a una mujer , representada por las bandas de hierro como las de un arpa, que con su espalda se reclina horizontal hasta casi tocar el piso. Una figura que replica a un paso tanguero típico, utilizado al momento del cierre de una pieza musical en que la pareja de bailarines da el toque de efecto más dramático y sensual a su baile.
Pero, más allá de esta representación, si le sacamos un poco de vuelo a nuestra imaginación, el Puente de la mujer funciona como una pasarela peatonal que permite una visión única del skyline de la ciudad.
La imaginación arquitectónica llevada a otro nivel
Diseñado por el destacado arquitecto español Santiago Calatrava , este puente, siguió el modelo de otros puentes muy similares, construídos también por Calatrava que cruzan ríos en las ciudades de Sevilla, España y en Redding, California.Estos tres puentes comparten una característica común de su diseño que es la gran aguja de acero blanco que sobresale en ángulo agudo elevándose al cielo y que la imaginación de su creador le atribuyó el rol de figura masculina, en el caso del puente porteño. La aguja, cumple la función de ser un ancla para los cables de suspensión -la mujer- y sostiene todo el tramo que dan forma a su-espalda- reclinada en paralelo a la línea del río.
Oficialmente inaugurado en diciembre del año 2001, el Puente mide 160 metros de largo y unos 7 metros de ancho. A la altura del tercer pilote, se ubica un mecanismo que le permite girar y abrirse para dar paso a los barcos que transitan la zona de las aguas entre el sistema de diques y canales. Hoy, cuando ya han pasado dos décadas de su inauguración, se ha convertido en una de las postales más características de Buenos Aires, junto con Caminito y el Obelisco.
Estética y funcionalidad
Una función muy interesante del Puente de la mujer, está dada por su particular mecanismo giratorio diseñado para dejar pasar el tráfico acuático que le permite girar en un ángulo perfecto de 90 grados. Esta característica lo convierte en una gran obra de ingeniería además de poseer un gran valor estético y simbólico . Calatrava pensó muy bien cada pieza y logró una estructura dueña de una funcionalidad efectiva para la navegación de embarcaciones de mediano porte que a la vez, es un imán para la vista y para el público.
Sin dudas, uno de los mejores rincones de la ciudad que ofrece una de las vistas más lindas para llevarse un recuerdo fotográfico único de Buenos Aires.