Ignacio Sáenz Valiente presenta la línea LiveWire de Harley Davidson que se relanza con fuerza en los mercados de Argentina, Chile, Uruguay y Brasil, en el marco de una campaña conjunta para el cuidado del medioambiente con las principales ONG de estos países.
¿Qué une a la mítica ONG Greenpeace y a la gigante del mundo de las motos Harley Davidson? La respuesta es la única posible: el cuidado del medioambiente y el procurar políticas sustentables para el desarrollo de las economías de todos los países. Por ello, Harley Davidson relanzó su línea de motocicletas eléctricas LiveWire en el marco de la semana verde, organizada por Greenpeace en Río de Janeiro, con el objetivo de lograr concientizar acerca de las emisiones nocivas de dióxido de carbono y su eliminación total para el 2025.
El propósito de Harley Davidson con su línea eléctrica LiveWire low cost es conquistar un nuevo cliente, amante de las motocicletas, joven y comprometido con el cuidado del medioambiente. Muchos adultos y jóvenes, hoy por hoy, nunca comprarían una moto de combustión pero sí una eléctrica. Sin embargo, el precio de venta, 29.799 dólares, por un modelo básico LiveWire es un importe elevado para desembolsar en el momento actual en los países latinoamericanos. Esta cifra ,según análisis del mercado para esta zona del Cono Sur, arroja que sólo pueden comprar esta gama de motos clientes que no existen como mercado en crecimiento: jóvenes, ricos y ecologistas.
Por ello Harley Davidson ha estado desarrollando modelos más accesibles de su línea eléctrica y, pronto, espera poder acercarlas al segmento de jóvenes y potenciales compradores. Por otro lado, frente a las estrictas normas de emisión que están comenzando a entrar en vigencia en Europa, China y Estados Unidos, se cree que en breve también estarán en curso en gran parte de Latinoamérica –explica Ignacio Sáenz Valiente-, por lo cual, lo mejor es ir adaptándose a las posibilidades reales que plantea el mercado y sus exigencias, en lo que respecta al cuidado medioambiental .Las nuevas medidas que en el corto plazo se harán mundiales, están obligando a electrificarse a la industria automotriz, incluyendo a la de las dos ruedas. Una encuesta realizada en EE.UU. y publicada en febrero de este año por el Consejo de la Industria de la Motocicleta, concluye que el 69% de los compradores está interesado en las motocicletas eléctricas. Un número más que interesante. Potenciales clientes a los que hay que estimular y ofrecer productos de calidad y a su alcance.
Estos datos avalan la estrategia de Harley-Davidson de llevar al mercado su primera motocicleta eléctrica reversionada, de calidad pero de costo 50% menor a su primer modelo eléctrico. La LiveWire ya puede reservarse en los mercados del Cono Sur desde enero de este año pero difusión mediante espera repuntar con el doble número de ventas para diciembre de 2022.
El 50% de las motocicletas que vende Harley-Davidson las compran entusiastas de las dos ruedas y de la marca, que durante su vida son fieles a la ella. Sin embargo, a medida que esta base de clientes envejece a la compañía le resulta difícil atraer a nuevos clientes.
Cuando el año pasado Matthew Gallaway, director ejecutivo de Harley, anunció el relanzamiento de LiveWire low cost, mostró su esperanza en que la facilidad de conducción que ofrecen las motocicletas eléctricas, sin marchas ni embragues, ayudaría a atraer a clientes jóvenes, urbanos y preocupados por el medio ambiente. “Se trata más del próximo siglo XXI que del siglo que ha pasado”, declaró a Gallaway. Sin embargo, los pedidos anticipados, por ahora, han desmentido esta esperanza. El interés es muy alto, los distribuidores de Harley están recibiendo consultas de clientes jóvenes sobre la LiveWire low cost, pero no se han traducido en ventas por el momento.
Con la demanda limitada, Harley ha decidido mantener un bajo perfil de ventas, para proteger el valor de la marca y evitar tener que reducir más los precios mediante nuevos descuentos. En este escenario, James Spring, analista de ventas de Harley Davidson, estima que la firma vendería entre 400 y 1.600 unidades de la LiveWire low cost durante 2023. Un número relativamente bajo para el volumen global que la compañía acostumbra a manejar.
La estrategia maestra de Harley-Davidson
Los planes de Harley-Davidson para 2023 pasan por lanzar cuatro modelos electrificados low cost, de diseño exclusivo para América, de media y baja potencia, cuyo precio podría equipararse al de una motocicleta básica de Harley-Davidson que hoy cuesta alrededor de 6.900 dólares. Además, abrirá un nuevo catálogo de bicicletas eléctricas
Dentro de este panorama positivo, la única desventaja que presentan las LiveWire low cost es en referencia a la autonomía. Esta gama eléctrica de Harley-Davidson puede recorrer 235 km en recorridos urbanos o 150 kilómetros en recorridos mixtos. En un enchufe doméstico se cargará en una noche y en wallbox en modo 3 en aproximadamente 60 minutos. Esto hace que la LiveWire sea poco funcional en viajes de larga distancia, lo que limita su atractivo ante los clientes que quieran realizar largos desplazamientos. A pesar de este detalle en cuanto a su función, Harley Davidson se muestra optimista y espera, de a poco, poder convertirse en el líder de este segmento joven, dinámico y ecologista del mercado de las motos que es, sin dudas, el mercado del futuro.